Estados Unidos, la democracia más antigua del mundo –hasta el momento de escribir esta nota—, sufrió esta semana uno de los peores ataques de su historia contra sus instituciones, luego de que el Capitolio fuera atacado por seguidores del presidente Trump vestidos de cuernos, pieles y banderas confederadas. Ahora, una buena parte de la población norteamericana se pregunta “¿cómo dejamos que esto pasara?“, ignorando que fueron ellos mismos quienes eligieron a un conductor de reality shows para ser su presidente.
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