La administración pública no es inmune a las distorsiones de la economía causadas por las políticas oficiales. El bajo poder adquisitivo de los salarios ha ocasionado, en casi todos los organismos del Estado, ausentismo laboral, renuncias y corrupción a todo nivel. El equipo reporteril de El Chigüire Bipolar logró infiltrarse en las instalaciones —o lo que quedó— de la Compañía Anónima Nacional de Telecomunicaciones de Venezuela (CANTV) y evidenció que en realidad lo que queda en ese ente es un solo trabajador, que está encargado de resetear el router que da servicio de internet a todo el país.

«Hace poquito teníamos un grupo grande de trabajadores, éramos como siete»
–Único trabajador de CANTV

Miguel Cárdenas, el único trabajador sobreviviente en la nómina de CANTV, ofreció declaraciones acerca de su trabajo. “Hace poquito teníamos un grupo grande de trabajadores, éramos como siete. Pero todos ellos nos renunciaron en masa y quedé solo yo. ¿Que qué hago aquí? Bueno, aparte de ver mujeres desnudas todo el día, siempre que haya luz, mi trabajo aquí es desconectar el router cada vez que hay una falla, contar hasta 10 y volver a conectarlo. Yo entré a CANTV como Barrendero II pero como quedo solo yo, me ascendí a Barrendero I, y además soy mi propio Supervisor, soy personal de confianza y me doy un bono de desempeño por ser el mejor trabajador de la compañía. Ah, y me agarré la oficina grande, la única que tiene una silla que se reclina. Yo no me voy, no tengo planes de irme, tengo una responsabilidad con el país para asegurarme que todos puedan disfrutar en casa del servicio de excelencia que CANTV le da al internauta venezolano. Además, ¿en qué otro país voy a conseguir yo este jamón? ¡Yo no voy a irme para otro país a estar desconectándole y conectándole el router a unos gringos! Solo les pido paciencia, a veces se cae el servicio y no llego a tiempo a la oficina, porque no tengo efectivo para el pasaje o porque no ha llegado la luz en mi casa o porque no pude bañarme porque solo me pusieron 2:34 minutos de agua, pero de que llego llego, todo lo hago por mi trabajo, el bono que me otorgué, por mi patria, que no se diga que el socialismo no trabaja por el pueblo” finalizó Cárdenas, mientras le daba un par de coñacitos al router para devolverle el internet a todo el oriente del país.