Piloto venezolano indignado porque nadie aplaudió en el aterrizaje vuelve a despegar
Para muchos, aplaudir cuando el avión aterriza es igual que usar hilo rojo con pantalón blanco: un acto niche. Sin embargo, para otros, como Armando Cáceres (41), un experimentado piloto de la aerolínea Estelar, es muy importante. Tanto, que el señor Cáceres decidió hoy volver a despegar su avión, sin dejar bajar a ninguno de los pasajeros, porque los mismos no aplaudieron lo que –para él– fue un aterrizaje perfecto.
Nuestro pasante subpagado, quien se encontraba en la torre de control de Maiquetía jalando para conseguir un pasaje y emigrar, pudo conversar con el alterado señor Armando, quien se negaba a aterrizar. “Oíganme bien: ¡No voy tocar tierra! Es que no puede ser posible que después de un trayecto Miami – Caracas, uno llegue a La Guaira, despliegue las ruedas, acaricie la pista de manera sutil, realice un sublime aterrizaje y nadie aplauda ¡Nadie! ¡Qué bolas! Primera vez en tantos años de carrera que me tocan unos pasajeros tan malagradecidos e insolentes. Por eso es que volví a despegar, para que aprendan y valoren mi trabajo. Ahí están, pegando gritos, todos nerviosos, pero ¿quién los mandó a no aplaudir? Aaah, tú ves, ahora se jodieron”, finalizó el señor Armando, mientras amenazaba con que iba a aterrizar en playa Pantaleta para recibir la ovación que él se merece.