Con motivo de la publicación del video «Caracas, Ciudad de Despedidas» un grupo de twitteros venezolanos practicantes del cyberbullismo recolectaron 150.000 firmas, para solicitar ante la Asamblea Nacional la instauración de la pena de muerte.

«Es indignante que un grupo de niñitos nos hayan hecho perder tiempo y ancho de banda con sus reflexiones y sus niñadas. ¿Quién les dijo a ellos que podían pensar? ¿Adónde están los padres de esas criaturas que les permiten tener cámaras? Por eso tenemos aquí 150.000 firmas, que recogimos en menos de 24 horas, para introducir una petición ante la Asamblea Nacional. Esto se tiene que acabar. ¡Pena de muerte! ¡Acabemos con la libertad de expresión!» afirmó Argenis Cartaya, un gordito de 36 años, identificado en Twitter como @elcochopechocho, principal impulsor de la propuesta, que dedicó ayer 1.653 tweets a hacer un análisis fílmico y semántico al documental. «Fíjate que ni siquiera juzgo lo que dijeron o dejaron de decir, no. Estos panas ni siquiera dominan el lenguaje audiovisual. Allí no hay un montaje estructurado, la narrativa es plana, con una edición absolutamente bidimensional, no hay dialéctica, ni siquiera le metieron CGI a esa vaina. ¿Qué son ellos acaso, estudiantes? No joda. ¡Hoguera con ellos! Por eso agarré a cada uno desde sus cuentas de Twitter y les desee la muerte, las de sus madres y sus antepasados. Lo hice con cada uno de los que salían en ese video como seguro lo haría si los tuviera al frente, o capaz no.»

Otra indignada usuaria conocida como @beliebercandanga fue más allá, al permitirse sugerirle a los diputados los castigos a aplicar en caso del más mínimo desliz. «Acá se tiene que acabar con el libertinaje, mano. ¿Hizo algo que no le gustó al colectivo? Ácido en la cara. ¿Se colaron fotos suyas en pelota? Inyección letal. ¿Su video viral clasista no logró 11 nominaciones al Oscar? Cámara de gases. ¿Publicó por error un Mensaje Directo como si fuera un tweet? Dilapidación. Así no se vuelve a equivocar. Mi tiempo es demasiado valioso como para desperdiciarlo viendo cosas sin calidad. Te dejo, porque ahora comienza ¡A que te ríes!»

Por su lado, Paul, uno de los protagonistas del controversial video, comentó lo afectado que se encuentra por la viralización de “Caracas, Ciudad de Despedidas”. “Dude, recuerdo cuando salió Rebecca Black y le di incluso con mi tumblr. La insulté hasta morir, le dije que esperaba que quedara estéril y más; pero nunca imaginé que la vaina se me devolvería. Pues nada, ahora uno no puede hacer un docu con los brothers sobre cómo sufrimos la lluvia, desde el carro, en Caracas. Es que no entendieron, los trayectos de Cerro Verde hasta La Lagunita está full de huecos, secuestradores y gente que usa el autobús. Nada pues, que mierda, ahora que se formó este peo… me iría demasiado”.