7 de la mañana. En los planteles donde hay luz, el timbre de entrada suena; sin embargo, los salones de clases permanecen desiertos. La escena se repite a lo largo de todo el país, pues este año son miles los niños y jóvenes que se han ausentado de las aulas, debido a la fuerte crisis económica que sacude al país. El alto costo de las matrículas, uniformes, empanadas y útiles escolares ha llevado a buscar medidas alternativas de enseñanza, como hizo María Quintero, una madre de 46 años, quien ahora educa a sus hijos con el programa matutino de Televen, «La Bomba».

La señora Quintero accedió a hablar con nuestro pasante subpagado sobre su novedoso método de formación académica: “¡Uy, no, mijo! Si te soy sincera, yo sí quería inscribirlos; pero entre los útiles, la inscripción, la mensualidad, la cuota extra, los uniformes, el fulano bolsito nuevo para que no los chalequeen los amiguitos y que debía dos meses del período anterior, se me hizo inhumanamente imposible meterlos al colegio este año. Eso sí, como una no nació para estar criando vagos, me tocó inventarme algo, para que se culturicen y se me conviertan en una gente de bien. Pensé que con Internet se podía, ponerles unos tutoriales de Youtube o algo así; pero el ABA es como el papá de los niños, tiene tieeeempo sin aparecer por esta casa. Así que lo hago con «La Bomba», porque tiene lo mismo del programa educativo. ¿No me crees? Fíjate: dan matemáticas, contando todas las veces que se cae Miss Monagas en los ensayos. Del castellano se encarga Osman Aray, explicando los diferentes usos de ‘esta muchacha’ y ‘esta niña’. Educación física la dan entre todos los animadores, bailando en cada corte. Eso sí, lo más importante es que aprenden de chismes: no importa qué carrera universitaria estudien, saber chismear siempre les abrirá oportunidades en sus trabajos” sentenció la señora Quintero, mientras reconocía no tener ni la más remota idea de qué puede aprender un ser humano del Gordo de La Bomba.