Espíritu de la casa se pregunta cuándo lo van a dejar solo otra vez
María Teresa Fuentes, el alma errante de una mujer que murió envenenada con jugo de lechosa por su madre en 1932, interrumpió sus espantos para quejarse de la familia que habita su casa, pues alega que en estos momentos de cuarentena no la han dejado sola en ningún instante. El ánima aseguró que tener gente en casa tanto tiempo la ha llevado a incluso tener pensamientos suicidas siendo ella un fantasma.
Fuentes, conocida en el mundo de los muertos como “la chama que la mató su mamá”, nos escribió una carta de reclamo que recibimos vía ouija. “Estoy más desesperada que nunca. En los noventa y pico de años que llevo habitando esta casa siempre conseguía pasar tiempo sola. Hubo huéspedes que eran familias que de vez en cuando salían, se iban los fines de semana o al menos dejaban a la abuela sola con la que conversaba. Pero esta gente lleva SIETE DÍAS aquí metida. ¿Qué está pasando? me van a volver loca. El papá y la mamá no dejan de ver la máquina de imágenes, a veces quiero deambular por los pasillos y ahí están instalando viendo algo que se llama Antena 3 donde todos son españoles y gritan las 24 horas del día. Los chamos ya no los soporto, el menor se la pasa encerrado en el cuarto viendo imágenes subidas de tono en una máquina que tiene. Ese niño se va a quedar seco, Dios mío. Y la mayor que es introvertida tampoco sale del cuarto escribiendo en su mini máquina de escribir ¿Hay algo que no me han dicho que esté pasando? Yo lo que quiero saber es cuándo me van a dejar sola de nuevo”, afirmó Fuentes mientras se iba un rato al infierno para no tener que compartir casa con su familia.