La emoción ocasionada por la transmisión del último —y decisivo— partido de esta noche, el séptimo de la final entre Cardenales de Lara y Navegantes del Magallanes, hizo que Juan Carlos Núñez, acérrimo fanático caraquista, sintonizara Casa Club TV.

«Claro que me pego a la emoción, mi pana. Ya compré mi caja de birras y aquí me tienes, frente al televisor, vibrando con los consejos de Maytte y con estas viejas que bailan la danza del vientre. ¡Uffff, mi pana, qué tripeo!» dijo Núñez, visiblemente emocionado con las coloridas imágenes que salían de su televisor. «Hasta aprendí a hacerme mi propia gorra con unos bordados impresionantes. El año que viene no pago ni por una camisa, me voy para El Castillo, compro mis telas y me pongo a coser franelas para todos, y todo gracias a Casa Club.»

Reportes de todo el país, aseguran que los fanáticos de Los Leones y de los Tiburones de la Guaira han explorado actividades nuevas gracias a esta final. «Yo apagué el televisor, me volteé, miré a mi mujer y le ofrecí un viaje a Margarita. Quiero reencontrarme con mi familia y también terminar de ver la última temporada de Grey´s Anatomy que me atrasé.” Confesó Mauro Albornoz, fanáticos de los Leones. Por su parte, la fanaticada de La Guaria aseguró que esta situación no es nada nueva. “No, mi pana, ando viendo a los caraquistas y parecen unos gafos, como si vieron la luz de repente. Ya nosotros estamos acostumbrados y no nos emocionamos con finales ni nada y este año no fue ninguna sorpresa.” Comentó Julio Goyo, fanático de La Guaira quién manifestó que lo ocurrido con su equipo en 2012 fue un error de la matrix.