La tarde de hoy, Dios comunicó vía telefónica que por primera vez en la historia no tiene la menor idea de lo que va a pasar el 8 de octubre; día posterior a las elecciones presidenciales venezolanas.

“¿Aló? ¿Aloooo?” Afirmó Dios al ser llamado a su línea telefónica privada que solo conoce el pasante dadas sus previas visitas al Cielo. “Ajá, ahora sí te escucho. Bueno, pues sí, no veo nada para el 8 de octubre en Venezuela. Es una interferencia cósmica del futuro, como la carrera de Hany Kauam. El punto es que no puedo distinguir ningún escenario. Finalmente los venezolanos saben que el 7 de octubre serán las elecciones presidenciales. Si Chávez gana, no sé que puede pasar. Si pierde, tampoco sé. Si Chávez no se presenta como candidato… mucho menos y si reaparece algún exchavista y gana convenciendo a la oposición de que es un candidato viable para ganar… no, no eso, no. Eso ya lo vivieron con Arias Cárdenas.” Afirmó Dios mientras daba excusas por haber creado a Mario Silva.

“En fin, organicen todas sus fiestas, cumpleaños, bodas y asesinatos vengativos antes del 7; después de ahí, está fuera de mis manos. A mí ya me encasquetaron como cincuenta mil bautizos en estos siete meses. Eso sí, prepárense a no recibir pago de vacaciones, ni nada antes del 7. Ustedes saben como son los empresarios que les encanta aguantar todo antes de unas elecciones.” Finalizó Dios momentos antes de ir a complacer la petición de Ricardo Sánchez de querer ser un niño de verdad.