La empresa estatal venezolana Petróleos de Venezuela (PDVSA), cuyo manejo operativo no tiene nada que envidiarle al de un abasto, dio a conocer hoy un plan de contingencia para combatir la reciente escasez de gas domestico que afecta a más de 5 estados del país, el cual consiste en ofrecerle a los venezolanos un servicio de boy scouts que irán hasta las casas de los afectados con el fin de ayudarlos a cocinar en fogata.

El director general de PDVSA, Manuel Quevedo, quien lleva todas las cuentas de la petrolera en un cuadernito Caribe, fue el encargado de ofrecer los detalles del nuevo servicio. “Actualmente estamos teniendo unas mínimas y casi insignificantes fallas en el servicio de gas que estamos seguro son culpa de la derecha fascista y norkysbatistista. Sin embargo, no podemos quedarnos de manos cruzadas, debemos hacer algo para que nuestro pueblo pueda acceder al gas o al menos pueda cocinar. Por eso a partir de hoy estarán a disposición de los consejos comunales unas cuadrillas de jóvenes boy scouts, totalmente entrenados para prender los fogones de los hogares venezolanos. Estos muchachitos están en la capacidad de hacer fuego con lo que sea: piedras, palos o hasta con los celulares potes que los hombres usan para monitorear a la amante sin ser descubiertos. Y aquí entre nosotros, si ya tienen el boy scout en la casa aprovéchenlo y pídanle que les haga el nudo de la hamaca, que bien buenos que son en eso”, aseguró Quevedo mientras mostraba a cuántos hogares ayudarán los boy scouts, en unas gráficas hecho por él en la última hoja de su cuaderno.

Por su parte, Ana Rojas, ama de casa afectada por la escasez de gas, criticó el nuevo plan de PDVSA. “Muy buena la iniciativa esa de que vengan esos boy escorts (sic) a la casa a prender las hornillas pa’ montar la comida, pero ¿y cuándo es que viene? Porque desde que hicieron el anuncio por aquí no ha pasado ni un solo camión con los carajitos esos. Seguro ya hicieron un chanchullo con eso, ¡no te digo yo!», afirmó la señora Ana mientras nos ofrecía un tazón de sancocho crudo que aún no había podido cocinar.