El expresidente de España y único observador político que tiene cataratas, José Luis Rodríguez Zapatero, recibió en la mañana de hoy al “máximo mandatario” de Venezuela, Nicolás Maduro, con un trato deferente y extremadamente amable, con el objetivo de preparar el terreno para preguntarle a Maduro si podía darle este fin de semana libre.

Una empleada adjunta al despacho de la presidencia, quién pidió que no reveláramos que se llama Margarita Flores (34) y que reside en la cuarta Avenida de Los Palos Grandes, Edificio Royal Gardens Prime Old Apartamento 3B, ofreció todos los detalles de la «jalada» de Zapatero para conseguir sus vacaciones. “Bueno te cuento, el señor Zapatero intentó ablandar al presidente obeso… perdón obrero, desde temprano trayéndole su café favorito: doble macchiato grande con crema de arroz, fororo y pesto. Luego durante el resto del día estuvo más atento de lo normal. A las 10:00 am alabó el arduo esfuerzo y trabajo que hace Maduro cuando juega Fortnite con su clan de amigos de 11 años. Después como a las 1:00 pm le hizo… ¡Ya va, que me da asco recordarlo! Ajá, le hizo masaje en los pies. Tipo 2 y media alegró a Maduro con una interpretación teatral de Peppa Pig. Y ya como a las 3 y piquito, que es la hora en la que presidente se va, Zapatero por fin se armó de valor y mientras doblaba lo que parecían sábanas –pero en realidad eran interiores– le preguntó al presidente, casi sin respirar y muy rápido, si podía tener librar el fin de semana. En ese momento todo quedó en silencio mientras Maduro miraba a Zapatero y Zapatero a él. Duraron así como un minuto hasta que el Maduro dijo: ‘¿¡AAAHHHH!?’, se rascó los genitales, se jurungó el ombligo y se fue. Zapatero se quedó sin saber qué significo eso, pero al rato lo oí cancelar un viaje, por lo que asumo que al menos este sábado y domingo seguirá legitimando a Maduro como presidente”, aseguró Margarita Flores, quien para el momento de la publicación de esta nota debe estar siendo capturada.