“¿Cuándo me visitas?” pregunta chamo en Chile que duerme en el sofá de otro amigo

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“¿Cuándo me visitas?” pregunta chamo en Chile que duerme en el sofá de otro amigo

En un intento desesperado por mantener viva una conversación, el joven Daniel Vázquez —emigrante venezolano actualmente residenciado en Santiago de Chile— le preguntó a su amigo Luis Manuel Vega cuándo irá a visitarlo desde Caracas, a pesar de que Vázquez tiene 2 años viviendo en el sofá de otra persona.

Nuestro pasante subpagado logró zafarse de las esposas y la mordaza que le colocamos el viernes pasado para hablar con Daniel, quien nos contó un poco más sobre la invitación extendida a su amigo de la infancia: “Men, no fue nada malo, pues. Estaba hablando pajita con Luisma porque tenía tiempo sin saber de él, pó, quería saber cómo estaba él y su familia allá en Caracas. Estar pendiente, pues, ¿sabes? Nada, le pregunté que cuándo me visitaría, porque yo ni de chiste me regreso a la weá aquella, a Venezuela, ¿cachay?, pero es que ni obligado por mi mamá. Además que no tengo papeles vigentes y no quiero ir a calarme ese peo de hacer diligencias, no, no, no. Claro, yo no tendría dónde recibirlo, yo estoy aquí en el sofá cama de otro pana. Siempre le digo que ese será el último mes pero es que el alquiler está rudo. Yo creo que hay unos hoteles baratos donde Luisma se podría quedar”, expresó Daniel.

Por su parte Luis Manuel nos explicó, en sus propias palabras, que su amigo es lo que podría definirse como “sendo mamagüevo”: “Qué arrecho es ese carajo, vale. Le estoy contando que coye, estoy trabajando en cinco lugares distintos, mis papás perdieron el trabajo, estamos todos pelando bola y tal, pero aquí estamos pues, ‘en la lucha’ como quien dice. Y me pregunta así de la nada que cuándo lo visito. ¡Qué bolas! No es que él me pueda tener un colchoncito, una cosa, porque ahí coye, lo pienso para ahorrar e ir en 4 años, cuando logre reunir para pagar el pasaje. Es que ni tiene cómo invitarme y— no, no, qué bolas”, comentó el muy indignado Luis Manuel, mientras colgaba para dirigirse a su cuarto trabajo del día.

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