Santiago Ruiz, un niño de 8 años de edad, quien recientemente vivió lo que es perder una amistad por culpa de la diáspora, recibió hoy su primera remesa imaginaria enviada por su amigo imaginario, Timmy, desde la ciudad de Santiagolandia, Chilelandia.

Santi, quien fue obligado a jugar con niños reales por su madre tras la emigración de Timmy, habló muy contento después de haber recibido su primera remesa imaginaria. “Estoy feliz, Timmy me mandó unos dólares imaginarios con los que podré comprarme el martillo de Thor, una nave espacial o hasta invitar a tomar el té imaginario a Susana, que es la niña que siempre empujo en los recreos y que solo Timmy sabe lo que siento por ella. ¡Ahora sí la voy a pasar super fino! Aunque no niego que si me pone un poco triste no poder disfrutar de todo este rialero imaginario con Timmy, preferiría agarrar esa plata e ir a un Tomorrowland imaginario con él, pero bueno, qué se hace. Igual me alegro porque si me está mandando dinero, quiere decir que estos dos años trabajando de pizzero imaginario, lo han hecho una criatura exitosa allá en Chilelandia”, sentenció Santi mientras le daba una faja de dinero imaginario a su mamá para ayudarla a pagar el colegio.