A su salida de un retiro espiritual de 3 días, Manuel Estrada tuvo una revelación de gran importancia. Luego de ese período dedicado a la autoevaluación, Estrada descubrió porqué las cosas le han salido mal en el trabajo, el amor y hasta los exámenes de sangre. No, no era que el universo estaba conspirando en su contra; en realidad, se le iluminó el entendimiento lo suficiente para descubrir que toda la vida ha sido un mamaguevo.

Luego de hablarle por tres horas a nuestro pasante sobre cuáles son las razones por las que debería convertirse a vegano, Estrada confesó sobre su revelación: «Man, fue una locura. O sea, de pana que es una revelación del más allá. Un trip, bro. Nada, huevón. –digo, “hermano”, porque estoy tratando de no referirme a personas con insultos–. Fui a ese retiro medio obligado. Le estaba cayendo a una chama toda espiritual para coronar y tal y le dije que por supuesto iba a ir. Pero qué va, ya no quiero saber nada de ella. Quedé renovado. Resulta que toda mi vida, he sido un imbécil. Yo decía que era mal carácter y tal. Pero no, en verdad era por mamaguevo. Yo había caído en un hueco y pensé que nunca sería feliz porque la gente era mala conmigo y se alejaba y tal. Yo pensé que eran tremendos gafos por no querer ser amigo de alguien tan de pinga como yo. Después de meditar tantas veces caí en cuenta: yo me agarré a la novia de Juanchi y a la de Andrés el mismo día no por ladillado, sino por quesúo. Y les mentí por rata. Coye, chamo, de verdad yo no sé cómo fui tan malo. Bueno, aquí estoy», concluyó Estrada quien luego le contó al pasante cómo cambió el cigarro por el vape.