Las ciudades de La Habana y Miami amanecieron hoy inmersos en llantos y sollozos, al conocerse la noticia de que los rumores sobre la muerte de Fidel habían fallecido mientras dormían en la twittosfera el día de ayer.

La noticia la dio a conocer Roberto Ernst, periodista de El Nuevo Herald, en su artículo “El Tirano estira la pata”. “El día de ayer, alrededor de las 9 am me llegó información de que el viejo cagalitroso de Fidel había muerto de leucemia, cáncer de hígado, SIDA y hemorroides. Procedí a escribir un breve artículo de opinión basado en lo dicho por mis fuentes y ahí despegó el rumor. Pero ya a las diez u once de la noche me habían confirmado que el rumor había muerto, que el Caballo no solo estaba vivito y coleando, sino que además estaba estrenando un mono Adidas y todo. No pude contener las lágrimas y junto a mi grupo de periodistas lloramos toda la madrugada” explicó Ernst, mientras salía al velorio del rumor, que se realiza en el café Versalles de la Calle 8 en Miami.

El entierro estuvo colmado de representantes de la comunidad cubana, que entre lágrimas se despedían de los difuntos rumores sobre la muerte de Fidel. “No lo puedo creer. Pensé que esta vez sí era verdad. Ya había preparado los fuegos artificiales que compré exclusivamente para la noticia, pero una vez más, todo fue una decepción. Mi hermano, esta vez incluso habían hasta fotos, pero resultaron ser photoshoses. Ya no puedo más.” explicó José Antonio Bardon, quien ya ha atendido a más de 25 entierros de este tipo en los últimos 10 años.