La plenipotenciaria, inmortal y levemente inconstitucional Asamblea Nacional Constituyente (ANC) aprobó este jueves una ley que, en boca del súper apuesto vicepresidente del área económica de Venezuela, Tareck El Aissami, “eliminaría el control de cambio, o lo dejaría igual, en realidad nadie sabe, ya va, ¿qué es lo que estamos haciendo?”.

El Aissami, de quien preferimos solo resaltar su virilidad y hacer chistes inofensivos porque no nos gustaría despertar junto a la cabeza de un caballo, hizo hincapié en que este nuevo decreto solo busca que las personas hagan operaciones cambiarias sin incurrir en ilícitos. “Ya no será ilegal venderle dólares al gobierno al precio que nosotros decidamos, en verdad nunca fue ilegal; y tampoco es que ahora puedes ir a comprar dólares libremente, hacer una transferencia de bolívares a un banco en dólares, no se emocionen, lo que estamos diciendo es que eliminamos el control de cambio pero se mantiene, ¿me explico?”, esgrimió El Aissami, siempre bien peinado y bello como es él, desde el podio principal del hemiciclo de la ANC.

Para algunos expertos económicos y asesores del gobierno nacional, esta medida es clave en la batalla contra la guerra económica y así lo certificó el El Perro Sanz, Ex-craquero-recurrente convertido en Director Político Económico y Social del Ministerio de Finanzas. “Es una medida totalmente válida, ¡¡QUEREMOS METERLE MANO A SUS REMESAS MALDITOS ESCUÁLIDOOOOS!! Jajajajajaja, ¿quién dijo eso? Aló, mamá, tuuuuuip, ¡¡no quiero bañarme!! Soy su amigo, Electrolux… Tun, tun, tun”, dijo babeándose el hombre que llegó a su cargo luego de, efectivamente, “biencuidarle” el carro a Giordani.

Las ramificaciones de la derogación de la Ley de ilícitos cambiarios es incierta, para algunos volverán las casas de cambio, la permuta, los guisos de los primeros años de Chávez, o no; quizás todo seguirá igual con otros nombres u otras definiciones del tipo de cambio. Pero si de algo podemos estar seguros es que siempre, pase lo que pase, el gobierno no va a tomar medidas reales de sinceración de la economía, no habrá un mercado cambiario libre, la crisis seguirá su curso y Tareck El Aissami seguirá siendo un buen mozo y perfumado hombre.