Colegios de toda la capital venezolana recibieron una notificación del Distrito Escolar Nro. 6 donde se solicitó la eliminación de las materias de informática, inglés, música y religión del pensum de la educación primaria. Tras conocerse esta decisión, el Ministerio de Educación, cansado de cortar materia por materia, optó por eliminar los colegios en su totalidad.

Laura Castellanos, representante del Distrito Escolar Nro. 6, afirmó que la exclusión de materias y escuelas cumple con las necesidades presentadas por el proyecto nacional del Socialismo del siglo XIX. “Ay, por favor, me van dejando el drama. Ustedes tienen que entender que tenemos que preparar a nuestros niños para los retos del siglo XIX. ¿Inglés, para qué? Esto es Latinoamérica y aquí se habla español, carajo. ¿Informática? Pfff, eso lo que hace es impulsar la venta de computadoras que termina beneficiando a las grandes corporaciones. Y no me hagan hablar de música, eso es de maricas. Por eso, después de haber eliminado ese poco de materias, nos dimos cuenta que mejor era cerrar los colegios de una vez. Mejor que todos sean unos pequeños analfabetas, ¡Todos por igual! Como nos enseña el Socialismo, de regreso a las verdaderas raíces venezolanas. Todos aprenderán a cazar su comida, harán bebidas alcohólicas del vegetal que tengan a la mano y dormirán en sus chinchorros masticando chimó. ¡Verdadero Corazón Venezolano!” Explicó Castellanos, mientras convertía un antiguo colegio en un cuartel para defender al país de una posible invasión imaginaria.

Humberto Vielma, ex-estudiante de sexto grado de primaria, aseguró estar un poco confundido, pero satisfecho por la decisión. “No entiendo nada. Primero nos regalaron unas laptops, las Canaimas, y ahora llegan y nos quitan Informática. Esa fue una plata botada entonces, ahora solamente la voy a usar para ver tetas. Ah, luego llegan unos días después y nos dicen que tampoco tendremos colegio. Por mí está bien, así tendré más tiempo para ver televisión, luego no entrar a la Universidad y terminar trabajando en el Gobierno. Quién sabe si hasta llego a ser un guisador y me compro tremendo carro. Pero, mejor no nos hagamos ilusiones todavía.” Destacó Vielma momentos antes de intentar acosar a una compañera de clases con unas páginas amarillas.