Luis Padrón, uno de los últimos turistas venezolanos en Nueva York, denunció haber sufrido prácticas racistas y xenófobas en esa ciudad cuando un grupo de indigentes cruzó la calle para evitar algún tipo de contacto con él.

Padrón expuso su caso ante los medios: «yo iba caminando por la Sexta Avenida, comentando en voz alta —como siempre lo hacemos— sobre las fotografías que nos habíamos tomado en el supermercado cuando de repente un grupo de indigentes que estaba pidiendo plata nos escuchó y cruzó la calle. Uno de ellos hasta apretó fuerte su potecito de leche y evitó en todo momento el contacto visual conmigo. Es como si supieran el status, el de venezolano viajando con CADIVI. O habrá sido mi gorra tricolor. No sé, pero me sentí muy mal. Especialmente porque yo iba a pedirles algunas monedas para comer. Saben, por aquello de la solidaridad entre colegas pobres» dijo Padrón mientras se remangaba su camisa Columbia para meter la mano en una fuente para resolver la cena.