Este martes, Álvaro Pérez, un señor que se la pasa discutiendo con los jóvenes porque según él “se ofenden por todo” casi sufre un infarto al ver a un adolescente que tenía las uñas pintadas de negro.

Pérez no desperdició la oportunidad de ofenderse con uno de los miembros de la llamada “generación de cristal”, en vez de invertir su tiempo en hacer cosas provechosas como… vivir lo que le queda, por ejemplo: “¿Qué es esa vaina, pues? La pintura de uñas es para las mujeres, ¿cómo es posible que estén utilizando eso? ¿Qué viene después, ah? ¿Quitarle la ropa a las mujeres? ¡INSÓLITO! Yo sí soy un macho de verdad, ni siquiera me corto las uñas, me las como y las escupo” aseguró un enfurecido Pérez a nuestro pasante subpagado, a quien casi le arranca por tener mechas. “Ojalá Dios me dejara ciego, para no ver tanta decadencia, en mi época los hombres eran hombres y no andaban con marisqueras. ¡Macho que se respete se baña 1 vez cada dos días para oler a HOMBRE! Está bien, cada quien que haga con su vida lo que desee, pero dentro de lo que Dios quiso, pues. El mundo se está acabando por toda esa ‘inclusión’ como ustedes los “liberales” le dicen. Me quieren meter eso por los ojos, pero no van a poder, primero muerto que flexible con estas aberraciones de hoy en día”, finalizó Pérez, sin darse cuenta que ya llevaba 45 minutos seguidos discutiendo sobre la pinta de otro hombre.