Miembros de la familia del difunto presidente Hugo Chávez denunciaron “mano negra” en las elecciones regionales del pasado 21 de noviembre, donde demandan el derecho legítimo por herencia del turno de gobernador a su mascota, el perro, Pugoberto “Pugo” Chávez, quién sigue disputando su puesto con Freddy Superlano de la Mesa de la Unidad Democrática.

Enviamos en un aeroexpreso ejecutivo que se accidentó 12 veces a nuestro pasante subpagado para que conversara con el aspirante a gobernador de Barinas, quién explicó: “Guau, guau, guaaaau, guau, guau, guau, guaaaaaau, guau guau guau guau, guaaaaaaaaaaaaaaau, guau, guauuuuu, Superlano, guau, guauuu guau guau guau guau guau guau guau guauuu guauu guauu guauu, guauuuuuuuuu, guau, guau, gua gua gua gua gua, guau, guau, guau, guau, guau, guau, guaaaaaaaau, vas preso, guau, guau exprópiese, guau, guau”, sentenció el canino mientras se lamía sus genitales mirando fijamente a nuestro pasante porque a fin de cuentas, es un perro.