Envían a Maradona a la Colonia Tovar mientras bajan las tensiones

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Envían a Maradona a la Colonia Tovar mientras bajan las tensiones

Considerando lo inoportuna que resultó ser la llegada de Maradona a Venezuela durante pleno conflicto diplomático con Colombia, el Gobierno Nacional tomó la decisión de enviar al DT de la selección argentina a conocer algunos de los principales atractivos turísticos del país.

El primer destino que escogieron fue la Colonia Tovar, pueblito cercano a Caracas fundado por inmigrantes alemanes hace un poco más de 150 años. “Enviamos al Camarada Maradona a pasar el fin de semana a la Colonia Tovar para que se distraiga. El Presidente Chávez podrá jugar Xbox360 con él a partir del lunes sin ningún tipo de interrupción, pero mientras se calma esto, Maradona estará mejor aquí, conociendo los encantos tradicionales de la Colonia Tovar” declaró a los medios lo que imaginamos era un funcionario del Gobierno, a juzgar por su chaqueta roja, su chemise roja, su gorra roja con siglas rojas bordadas, sus zapatos Converse rojos y sus jeans rojos Minelli.

Nuestras fuentes pudieron informarnos que Maradona estaría bastante incómodo con el destino seleccionado, el cual consideró inadecuado e inoportuno. “Pero ché, ¿cómo me van a traer a un pueblo alemán? ¡Después de esa goleada que nos metieron en el Mundial, que boludez tan grande! ¡Yo quisiera saber además qué carajo hace un pueblo alemán acá en Venezuela!” habría confesado Maradona a nuestro informante, sin saber que estaba siendo grabado.

“Me tienen repodrido con la cerveza alemana, las salchichas alemanas, el Sauerkraut, el Strudel y todas esas ridiculeces! ¡Me tienen las pelotas hinchadas con las fresas con crema y los paseos en caballito! Mirá, ché, yo soy un adulto, ¿viste? No estoy para estas tonterías, ¿creen que soy tarado?” finalizó el astro argentino, mientras un funcionario le pedía que sonriera para la foto y le recordaba que las casas del lugar estaban hechas siguiendo la tradición arquitectónica de Bavaria, lo que las hacía bastante cuchis: “¿No parecen de Hansel y Gretel, camarada?”.

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