El Gobierno venezolano, comandado por el encargado de ver Escandalosos en la oficina presidencial, Nicolás Maduro, ha negado en reiteradas ocasiones que en el país exista una crisis migratoria y para demostrarlo, enseñó ayer en cadena nacional imágenes de calles repletas de personas. Sin embargo, esas personas no eran más que maniquíes que tenían como objetivo ocultar que en Venezuela hasta los amigos nuevos que has tenido que hacer porque los otros se fueron, también se fueron.

Maduro, quien nunca ha visto un maniquí con su peso, dijo que no se puede pensar que el país se está vaciando porque por unos pelagatos saliendo por Cúcuta. “¡Basta de mentiras! Las calles de la Patria Grande de Bolívar están repleta de gente bella, trabajadora y sin rasgos faciales. Es que a donde miro, veo a un pueblo con cuerpos esculturales. Además, vestidos hermosos, luciendo pantalones de marca y vestidos de noche a plena luz del día demostrando que en Venezuela nadie se quiere ir, ni se esta yendo, ¿verdac Elías?”, sentenció Maduro mientras se daba cuenta que Elías Jaua era un maniquí y no porque no le contestó, sino porque no estaba babeado.