Todos los 18 de noviembre se celebra el milagro de la Virgen de la Maracuchita en Jiangsu, China. Una tradición religiosa que celebra la aparición de una imagen santa en una tablita a las orillas del Mar Amarillo chino. Los feligreses organizan fiestas llamadas los amaneceres guzhengeros donde toman casi hasta perder el hígado y el 18 reciben la llegada de la virgen.

Enviamos a nuestro pasante subpagado en un puerta a puerta hasta China para que tomara las declaraciones de Chilot Lam Montiel, un adorador de la Virgen de la Maracuchita: “Aquí todos los años le rendimos honor a nuestra virgen, una virgen que nos sirve un día feriado para volvernos leña, comer patacones stir fried y hacer lo que se hace con cualquier celebración religiosa: beber hasta que el cuerpo aguante o ir a la playa”, aseguró Lam Montiel mientras interpretaba una canción oriental llamada “La Elegida”.