En la tarde de hoy, un amistoso partido de Ultimate Frisbee transcurría en absoluta normalidad entre los equipos Cachapabuela y Cuatroveinte, en la plaza Juan Pablo II de Chacao, cuando agentes de la Oficina Nacional Antidrogas (ONA) aparecieron para hacer una redada, causando sudoraciones nerviosas de los participantes y —por supuesto— la finalización temprana del juego.

Miguel “Rótala” Acosta, capitán de los “atletas” de Cuatroveinte, nos contó sobre la suspensión del partido después de haber corrido al estacionamiento techado más cercano: “Broooo. ¡Una cagada! Tú sabes que con todo el rollo de la cuarentena hay que salir, estirar los músculos y apreciar cada segundo del día y del bello sol. No todo es fumadera y trips, ¿me sigues? Entonces nada, yo ya tenía el número del homie de los Cachapabuela, que casualmente es mi dealer, y cuadramos para vernos hoy y lanzar unos frisbeezasos al aire, oxigenar el cerebro y sentir un pelo más la naturaleza, estar en contacto con la grama, el aire, tú sabes. Independientemente del resultado íbamos a celebrar o a pasar el mal rato con un jay. Como sabemos que la situación está ruda, cada chamo del equipo trajo o rollings o pipas o unos gramitos ahí, para colaborar pues, que cada quien bien responsablemente hiciera su cosa y nada de estárselo rotando, pues. En pleno juego yo estoy ahí en la zona atrapando el disco y ¡zas! Aparecieron los pacos antidrogas y nos jodieron toda la tarde. Cada uno salió corriendo pa’ su lado. Esas brujas no perdonan. Bueno, será mañana que volvemos a darle”, dijo Acosta, quien se distrajo viendo al perro de la ONA.

Mientras le sembraban una bolsita en su bolsillo, nuestro pasante logró conversar con el distinguido Pérez Pérez Pérez, encargado del operativo: “Estábanos en un estado de alerta porque unos suidadanos nos habían enalertado a la comisión que unos presuntos jóvenes se hallaban en el recinto antes mencionado entregados a la prástica de un deporte que se juego con un dispositivo volador que vuela del tipo frisbee aparentemente bajo el efesto de sustancias piscotrópicas, más enspecíficamente cánibas. Los miembros de la comisión se apersonaron y luego de identificarse dieron la voz de Quieto, pero los suidadanos lograron escaparse con una acción del tipo monetario para la adquesición de bebidas del tipo gaseosa”.