El Aeropuerto Internacional de Maiquetía ha visto el mismo número de despedidas que de señores que salen del cuarto de la mamá del pasante subpagado y este martes no fue la excepción cuando los miembros de la familia Meleán Ortíz despidieron al fantasma de Altagracia Rivas, la niña que habitó por más de 170 años en el cuarto de la abuela.

Nancy Ortíz, dueña del hogar donde el espectro de la niña Altagracia hizo apariciones y un par de posesiones, ofreció sus declaraciones sobre la despedida: “Este es un momento muy triste para nosotros. Se nos va la niña Altagracia para España a buscar la nacionalidad heredada por parte de su padre, un monje franciscano que tuvo sexo con una mujer y para no levantar sospechas sobre su pureza tuvo que matarla en el cuarto de la abuela. Claro que nos da pesar que se vaya, por más de que intentó asustarnos todos los años tocándonos los pies o poniendo a todos en la familia contra para que nos matáramos, la vamos a extrañar. Ahora no sé qué haré cuando vaya al cuarto de la abuela, prenda la luz y ella no esté detrás de mí mientras veo el espejo de la peinadora. No sé si podremos dormir sin su llanto a las 3 de la madrugada. Se me hace un nudo en la garganta” sentenció Ortíz al momento de preguntarle a Altagracia por qué viajaba en avión si ella era un fantasma y la ciencia dice que los espíritus vuelan.

Por su parte, Altagracia Rivas habló con nuestro pasante subpagado, quién es materia, sobre sus razones para emigrar de Venezuela: “Los apagones le quitaron toda la diversión a ser fantasma, ya ni siquiera podía apagar y prender las luces porque nunca hay electricidad. Y es que esa gente ya le perdió el miedo a todo el mundo, después de ver a Diosdado Cabello en el Mazo, nada te puede dar más terror” comentó Rivas quien buscará un AirBnB para embrujar en Madrid.