El sargento Jonás Carmelo Morales, adscrito al comando de la Policía Nacional Bolivariana de Macaracuay, municipio Sucre, realizó la aprehensión de un despiadado ciudadano que incurrió en el delito de no tener la factura de un pollo con yuquita, arepa y ensalada rallada, el cual fue decomisado y puesto a la orden de otro policía del comando para que lo picara y repartiera en platos entre todos los comensales del cuerpo de seguridad.

Morales, quien se especializó en la Brigada Anticenas de Venezuela (B.A.V), expandió detalles del caso con parte de la evidencia de tipo guasacaca todavía en el bozo: “El ciudadano David Muñoz circulaba por las adyacencias de mi alcabala sin la factura de mi cena, y sin su debido postrecito, lo cual de inmediato activó mi sentido policial y mis ganas de comerme alguito. Desarticulamos esta peligrosa estructura criminal de comensales sin factura en la cual se decomisaron un total de: 100 mililitros de guasacaca, 2 patas, 2 cuadriles, 2 alitas, 3 servilletas, más de 10 yuquitas de tipo fritas y $20 en efectivo que me hacían falta. Esos artefactos realizados para cometer el crimen fueron analizados por el equipo de criminalística y mi persona, quienes determinamos que estaban sabrosos pero dan mucha acidez, por lo que el detenido podría enfrentar hasta 3 meses de cárcel o una fianza de hasta 3 palos transferidos a mi cuenta personal”, sentenció el funcionario antes de emitir un eructo que se sintió a 20 kilómetros a la redonda.