Ante los nervios que le causa su eventual candidatura a Miraflores, el vicepresidente Nicolás Maduro aceptó los consejos de Diosdado Cabello, que le habría recomendado dormir con las medias mojadas y con el aire acondicionado bien frío para preservar al máximo su salud.

Enviamos al pasante subpagado sin agua ni una galletica a Miraflores, para obtener las declaraciones del vicepresidente Maduro. “¿No has desayunado? Oye, hubieras venido ayer. Hasta ayer eso estuvo llenito de comida. ¡JAJAJA, no vale, echando broma! Pasa, siéntate. Yo tampoco he comido nada. No he comido nada, no he podido ni dormir, eso es puro nervio todo el día… ni con valeriana ni con passiflora he podido dormir. Eso es toda la noche echándole mano a ese bigote, pensando y pensando. Imagínate, yo podría ser el próximo presidente de Venezuela, así, de un día para otro. Así que le pedí consejo a Diosdado y lo primero que me dijo fue que me mojara las medias y pusiera el aire bien, pero bien frío; que eso me ayudaría a dormir bien. También me recomendó que comiera mucha carne roja; según él eso es bueno para mi edad. Ah, y que tomara leche completa todas las noches. Supuestamente eso es lo mejor para mantener las arterias limpiecitas. Yo voy a probar a ver, porque Diosdado no ha parado de darme consejos desde que Chávez me nombró su sucesor” declaró Nicolás Maduro mientras usaba un secador de pelo en la bañera para peinarse el bigote.

Posteriormente enviamos al pasante a casa de Diosdado Cabello, para saber un poco más sobre este repentino interés en la salud de Maduro, pero al llegar no se encontraba en su hogar. Sus mayordomos le dijeron al pasante que Cabello vendría en diez minutos, así que lo invitaron a esperar en su despacho. Allí descubrió fotos de Maduro con extrañas inscripciones hechas con un Sharpie rojo e instrumentación vudú, todo esto sostenido con lingotes de oro para que no se los llevara el viento. Nervioso, el pasante decidió salir corriendo del lugar.