Un Blackberry Bold 2, propiedad de la señora Julieta Zambrano, fingió su muerte la tarde de hoy para así evitar el envío de más mensajes en cadena navideños; actividad que su dueña ha hecho incesantemente desde el 24 de diciembre.

Adolorido y casi sin batería, el Blackberry comentó los abusos a los que ha sido sometido durante todo diciembre. “No es posible: aparte de la pela que me dio el día de las elecciones, que ya era suficiente para fundir cualquier aparato electrónico, el 24 de diciembre comenzó la vieja esta tempranito con el clásico mensaje de ‘antes de que se caigan las comunicaciones’. Este mensaje se lo envió a todos y cada uno de los contactos. Luego el 25 envió otra cadena más, una sobre el nacimiento del niño Dios y muchas caritas. ¡No me hagan recordar eso! Nunca había enviado tantos emoticones en mi vida, ¡NUNCA!” explicó el Blackberry momentos antes de volver a apagarse ante la llegada de la señora Julieta.

“Esos teléfonos del cipote no sirven, bendito sea Dios” exclamó la señora Julieta Zambrano apenas vio al pequeño Blackberry en una esquina. “No puede ser, chico. Yo quería enviar mi cadena del espíritu de la navidad del 26 de diciembre y los chalequeos del 28 de diciembre, pero no puedo ahora. No sé qué le pasó, de repente el coroto este se apagó, lo reinicié, se apagó otra vez y lo volví a reiniciar. Pero después de hacerlo quince veces seguidas, entendí que se había dañado. Aunque yo creo que el perol ese me está jodiendo. La otra vez lo vi en la noche prendiéndose y conectándose al cargador, creo que se me está escondiendo.” Culminó la señora Julieta mientras gastaba toda su quincena en su Blackberry número siete en los últimos cinco años.