Si algo ha caracterizado al actual estado de salud del presidente Chávez, ha sido el misterio. El día de hoy, un nuevo rumor viene a sumarse a esta ola de especulaciones, que tiene en vilo a todo el país: en teoría, detrás del mal que aqueja al comandante estaría nada más y nada menos que la mente maestra de J.J. Abrams, creador de Lost.

Rómulo García, bachiller desempleado de 18 años y presidente del Club de Fans de Lost de El Marqués, visitó nuestra redacción para hablarnos sobre su descubrimiento. «Pana, todo está clarito. Primero fue la rodilla, ahora la pelvis. ¿No lo ves? La vaina va subiendo por el cuerpo. Esta actual dolencia sería el reflejo de una lucha que mantienen en una dimensión paralela unos viajeros del tiempo, que luchan por el control de una isla-nación-estado enclavada en el medio de la Atlántida» dijo García, mientras le preguntaba al pasante subpagado si no tendría por casualidad unos twinkies por ahí.

«En la isla-nación-estado hay dos facciones enfrentadas por un secreto que viene de generación en generación. Son dos grupos de personas que viven en esa isla sin tecnología alguna, sin acceso a nada, subsistiendo del canibalismo. La primera facción que descubra cuál ese ese secreto, podrá escapar de esa isla maldita, que sólo existe en la mente de un perverso programador de software en el futuro. Pero lo pelúo del asunto es que cada mal pensamiento de este programador se convierte en un ejército de zombis coprófagos que deambulan por la isla, alimentándose de la mierda de los náufragos» dijo García, visiblemente emocionado. «El rollo es que para descubrir ese secreto, los tipos tienen que descifrar un código secreto que está tatuado en la espalda del hijo del cacique de la facción enemiga. Pero deben descubrirlo chola; por un lado, porque los zombis coprófagos van eliminando a los náufragos uno a uno, y por otro lado, porque este tatuaje-código sólo se hace visible en los solsticios de verano de los años que terminan en 11. ¿No ves la relación? ¿Solsticio, zombis, pelvis, rodilla? ¡Está clarito, pana!»

En vista de que el argumento teórico no suena del todo descabellado, quisimos obtener la opinión de J.J. Abrams; sin embargo, su asistente personal dijo que no podría atendernos, ya que el susodicho escritor aún estaría riéndose del final de Lost.